
Panabaj, Guatemala (AP) - Una mujer Maya llora en el Depto. De Atitlán, Guatemala al encontrarse con sus familiares muertos y todas sus posesiones desaparecidas luego que se siguiera desarrollando el drama de los deslaves del Huracan Stan, cuyos estragos no solamente se hacen sentir en El Salvador y el Sur de Mexico. Ciudades enteras, poblados que han desaparecido bajo el agua y los aludes.
Ahora reportaba el periódico de El Salvador que varias familiaras se han visto afectadas y la ayuda es poca porque las lluvias torrenciales continuan. Hasta ahora se calculan conservadoramente la confirmación de la muerte de arriba de 2,000 personas. Pero esos números ni siquiera alcanzan a cubrir todo lo demas que no se ha podido rescatar, entre los escombros, el lodo, y la lluvia copiosa. Esta temporada es para olvidarnos de nuestros problemas pequenos, nuestras pequenas discusiones, nuestros pequenos altercados y nuestras pequeñas rencillas. Hay algo mas importante, y eso es el interceder por tanta gente nuestra que se encuentra sufriendo.
A mis lectores siempre los animo a pedir oración en sus iglesias, que Dios tenga misericordia y les envíe mensajeros, gente que les hable de Jesucristo.